miércoles, 18 de enero de 2012

POEMA

Tú, la negra sombra
de columnas y pasillos.
Yo, el libro empolvado
de olvido, soledad y frío.
Tú, la nube de incienso.
Yo, el sacrificio inmolado.
Tú, los ojos de luz.
Yo, los párpados sombríos.
Tú, los colores del día.
Yo, la noche inquieta de insomnio.
Tú, el becerro de oro.
Yo, la madera de un árbol
despojado de hojas.
Tú, los oídos embelesados.
Yo, la voz que recita y canta.
Tú, el amor olvidado.
Yo, del amor olvidado.
El nosotros que fuimos,
el tú y yo que somos.

DIEGO GRANADO-Cádiz-

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