CIRCO

El hombre elefanta sale ardiendo en un incendio de llamas andinas.
El bombero torero hace sombras chinescas con pompas de jabón.
El hombre araña se viste de gato porque para él las erres son ges.
El equilibrista llega a fin de mes a la velocidad del hombre bala.
El escapista queda encerrado en su mutismo de mutis por el foro.
El forzudo escribe poemas de amor al estilo Leopoldo M. Panero.
El hombre bala tiene voz de oveja y casco de equlibrista.
La mujer barbuda compró en ofertas las hombreras de los Locomía.
La carpa, rodeada de anzuelos, tienes ojos de polvo de estrella.
Los contorsionistas retornan con el contorno sionista.
Los acróbatas tienen batas de altura y boatiné.
Los titiriteros recorren los parques y jardines con ojos acechantes.
Los ventrílocuos expulsan gases del oficio en lenguas muertas.
Los tragafuegos alquilan sus piedras de mechero del riñón.
Las pistas del circo son circulares como un papel de oficina.

GUILLERMO JIMÉNEZ FERNÁNDEZ -Mérida-