POR LA RIBERA
Me enamoré de tus ojos
un día por la Ribera,
cuando vi tus labios rojos
en la verde primavera.
Fuiste de mi alma dueña
cada vez que tú me miras,
sufre mi piel marfileña
porque sé tú suspiras.
Yo siento a tu corazón
lo mismo que siento al mío
que se llena de ilusión
cuando pasas junto al río.
Se quejan de tu mirada
los reflejos de la luna,
y la luz de la alborada
de mi Córdoba moruna.
Fui preso de tu ternura
por eso te sigo el paso,
para coger tu hermosura
que celoso está "Pegaso".
La luna está enamorada
de aquellos tirabuzones,
que te los peina la albada
a compás de mis canciones.
Serás Minerva, yo espero
que me llenes de alegría,
si tú me dices. ¡Te quiero!
tu esposo seré algún día.
Me enamoré de tus ojos
un día por la Ribera,
cuando vi tus labios rojos
en la verde primavera.
JERÓNIMO DORADO-Ayamonte-
lunes, 20 de febrero de 2012
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