VESTIDO DE VERDE Y VIOLETAS

Los árboles se van vistiendo,
con sus vestidos más verdes,
sus hojas aún muy tiernas,
agitadas por una suave brisa,
que pasa casi imperceptible.
La luz de marzo  va llegando,
pronto apartará al invierno,
y se instalará en la vida,
con sus mejores galas.
Llenando el campo de flores,
cubriendo los árboles de hojas,
para dar sombra al paseo,
que conduce hasta la plaza.
Y pasearán los más viejos,
y correrán gritando los niños,
atravesarán la plaza personas,
hacia su trabajo, atareadas...
con un porte recto y decidido
tal vez, un poco estresadas.
Me sentaré en un banco...
mirando la danza del viento,
entre las hojas de este árbol,
que va dando sombra al banco,
mientras va agitando las hojas,
dibujando sobre el suelo,
arabescos  de sol y sombra.
En este remanso de paz,
sosegada y muy tranquila,
esperaré la llegada puntual,
de esta nueva primavera.
Una tímida violeta, asustada,
muy pequeña y discreta,
crecerá en algún camino,
en algún parterre o junto al río,
anunciando el buen tiempo,
muy bajito y con paciencia.
Pero con la fuerza de la vida,
para que yo la acaricie...
con las palabras más bellas,
que ella ,la violeta, se merece.
!Y llegará la primavera...
con ese aroma a violetas!.

MARÍA LUISA HERAS VÁZQUEZ -Barcelona-