No es sueño un caminar, caminando el camino de los sueños.
No es desilusión esperar a que otros amen para sentirte amado.
Porque briosos corceles con adalides montados,
En vuelos con nubes en tempestades
surcan los cielos queriendo encontrar a la amada.
Risas de fantasmales bocas imprudentes ríen a carcajadas
Mórbido placer que con ecos retumba
Los apaciguados éteres donde duerme el amor
Oculto en brazos del agigantado ocaso
Sin sol, cielo y sin mundo.
Espectral es el sonido del canto en las noches
Vacio el silencio, sus sombras, de alboradas se preñan
Mustias palabras pronunciadas sin letras
No quieren organizarse, el mundo agoniza
No hay vibración con ritmo ni rimas en las notas.
La quietud se despierta… nace indemne la vida
El escorpión de la muerte yace vencido.
Galopan de nuevo corceles
Y los adalides, enarbolan banderas del triunfo
Ha triunfado por siempre el amor,
Y los corazones laten de prisa.
Quieren llenarse de su Prístina Esencia.
¡Qué Viva el Amor, y reine por Siempre!
Lesbia Gómez
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