AÑORO ESAS MAÑANAS Y MADRUGADAS...

Añoro esas mañanas y madrugadas,
claro oscuras albas y alboradas,
cuando un rayo de sol se cuela,
en esas horas tempranas,
tímido a despertar los adormecidos platanales
y a calentar los aromas
de las blancas vestiduras
de los florecidos cafetales,
cuando despiertan el tolón y el talán,
el tañer de lejanas campanas,
que a sus afanes convocan,
cuando se oyen ya despiertas
cantores alondras, paraulatas y ruiseñores,
y el colibrí más inquieto,
de amores henchido y motivado
ha besado ya a todas las flores,
y llevado en su pico sus deleites, sus dulzores,
cuando el rocío, con sus cristalinas gotas,
haya ya visitado a sus amadas rosas,
cuando despertando de un sueño
y ya quisiera avenirse otro
hacernos, como la lluvia sobre el ventanal,
de los perezosos sueños, un alargado final,
entre cobijas de pieles tibias, cobijados,
amos, señores y enseñoreados
y de todos los amores, dueños.

Angel Ignacio Chacón Aquino