…Aquí, hasta acá, ten cuidado por favor.
No hagas crujir la hojarasca adusta.
A caso no te das cuenta cómo sufre el corazón por el desamor.
Así chascan las hojas y las ramas secas,
Algunas el otoño las aniquila,
Otras fenecen lentamente hasta marchitarse,
por provocación o fuera de tiempo.
El tiempo es el otoño.
Tu desprecio y la insolencia hacia mí
Son el crujir y la retraída indiferencia que se anidan en mi corazón…
Misael García Consuegra.
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