Hoy vi con mucha lástima al rosal
cuando de madrugada fui al jardín,
mas no me sorprendió, pues es por ti...
¡Ay, jardinero, no fuiste leal!
Le robaste el perfume y su color,
se quedó pálido su corazón
y muchas lágrimas sin ilusión
provocas, traicionero de su amor.
No encuentro arco iris en ningunos mares
por las aguas con tonos tan brillantes,
de alegres olas con las crestas de antes,
¡Ay, jardinero sin jardín de altares!
Necesito sentirme la primera
dentro del corazón del ser amado;
iré al doctor, que tú me has lastimado
y prefiero no verte mas, quisiera.
Prometo caminar siempre adelante,
nunca mas retroceder hacia atrás,
pues contigo no iré nunca jamás
porque tengo memoria de elefante.
Algún día vendrás sin vanidad
y querrás que perdone tus errores
ofreciéndome un ramito de flores
buscándome por tu felicidad.
Mi devoción por ti acabó en dolor,
pero hace tiempo que yo te olvidé;
me limito a decirte que se fue.
Supongo, que tampoco sentí amor.
María Sirena Matri Mar -ESPAÑA-
No hay comentarios:
Publicar un comentario