Los jueves a las diez y pico de la noche las pantallas de televisión de Tele5 se llenan de ojos que contemplan la vida y obra de mafiosos, de coches de lujo, de mansiones de ensueño, de prostitutas caras y retocadas, de paisajes idílicos y del esplendor y la pompa de lo inalcanzable y el glamour de lo imposible. De pronto los ojos del Duque brillan con su sonrisa de malo que rellenan una cara de niño bueno. Y si un día una de las protagonistas se marea da igual que se llame Yessi o Vanesa, es quizás porque alguno de los chulillos la dejó embarazada. Y si el Duque se baña desnudo, claro, en un yacusi de los caros, entonces una de ellas, Yessi, Vanesa (que es la que se va a ver a sus amigas) (o no) o Catalina, yo que se, intenta semi violarlo con todas las de la ley, es lo que tiene el amor cuando se quiere de veras. Y el tal Duque, el guapo oficial del reino, rige los destinos de las adolescentes y de las no tan adolescentes, ahogadas todas en unos ojos de impresión y en un cuerpo no menos apetecible, según dicen. ¿Sabremos al final si sin tetas no hay paraíso? No lo se, solo se que el culebrón continuará la próxima semana.
GUILLERMO JIMÉNEZ FERNÁNDEZ -Mérida-
No hay comentarios:
Publicar un comentario