... un día que Dios estuvo enfermo,
grave.
C. Vallejo.
Yo nací para estar sola.
El tiempo lleva su estudio.
Yo nací con el preludio
de las noches, sin estola,
sin palabras, sin aureola,
sin perfil, sin latitud.
Mi cuerpo es el ataúd.
La realidad es absurda.
Llevo en la lengua una burda
sílaba, historia, quietud.
Vivir es un intervalo
entre el tiempo y yo, una vela
sin estampa, la zarzuela
repetida de un regalo.
Amo las noches, exhalo.
Yo nací con la tardanza
de las ruptura, en la danza
de nacer sin más cosecha.
Perdón olvidé la fecha…
Yo nací, no hay esperanza.
Nacer es un aforismo
que lleva metamorfosis.
La vida se da por dosis
de sexo, de catecismo,
por razones en un mismo
calendario de renuncias.
Yo nací, por las denuncias
esperan otros. Lamento
haber nacido, no miento.
Yo nací: tú ni pronuncias
la existencia de mi sombra.
Nací en la crisis del mundo
y no había ni un segundo
para dios. Nadie me nombra.
La ciudad ya no se asombra
de perderme en estos males.
Espero que tú no exhales
la nostalgia del entorno.
No hay cuerpos, ya no hay retorno.
Yo nací… no hubo señales.
Del trabajo Consejos locos y retazos de la vida de MAYDOLL MORALES PÉREZ
LA NOCHE DE VERSOS EN FABRICANDO POEMAS
Hace 2 días
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