“TAL VEZ”

Tal vez creíste…
que mi puerta cerrada estaba.
Te abrí mis cerraduras oxidadas por el tiempo.
En mi pensamiento estás
de mi mente nunca te fuiste.
En ella sigues presente.
Entraste en mis cerrojos oxidados
tú los engrasabas.
Te fundiste con mi sangre alborotada
con tu amor alumbraste mi oscura cueva.
El recuerdo nebuloso que sentía ante el amor
se volvió del color del azul cielo.
Mi camino conocías de memoria
momentos vividos llenos de éxtasis conseguidos.
Dentro, tu sangre se mezcló con la mía
ya no te dejé partir y sentí el ardor dentro de mí.
El óxido desapareció y sentimos de nuevo amor.
El tiempo pasado no borró nuestra unión.

María Antonia Moyano Oliveros