lunes, 26 de mayo de 2014
CAER
Dejaré caer mi cuerpo al abismo
oscuro que alimenta mis penas
dejaré esta vez caer mis sentimientos
a un lado de tu corazón,
pues ya no te pertenezco y eso
a quien le puede importar, si mi
alma es la que sufre tu desprecio,
y mi corazón quien vive en soledad,
los días se hacen eternos,
como la eternidad de esperar tu regreso,
quizás si esta noche dejo mi cuerpo caer al vacío
comprenderás que hay alguien que
prefiere morir de amor que vivir
en soledad, recordando las horas que a tu lado
pasé, en silencio lloro y me lamento,
en silencio escucho las penas del viento
quizás aquellas fueron las horas de salir
del encierro y salvar mi vida,
pero destruiste con tus palabras mi fe, mi paz,
palabras ocultas en el cielo que recuerdan tu triste
despedida, aquí sin fuerzas me despido del mundo
solo por un momento, solo por perder tu amor
mi voluntad se terminó, las heridas sangran y desgarran
mis pensamientos, mi cuerpo y en mi pecho los
latidos de mi corazón me gritan que no, esta vez
ni piedras en valor enfrenta al fantasma que habita
en tu interior, dejaré caer al frío abismo el egoísmo
que se apoderó, de los días de amor que hoy son
el grito de mi dolor.
Caer muy profundo y no volver a creer en el amor,
caer al fin que todo es un engaño,
que se alimentó de la pasión, eso solo
la dicha de volver a sonreír por un rato,
es creer que el amor existe en un mundo falso
con personas que no saben lo que es sentir, vivir,
reír, llorar y cantar por amor, darlo todo sin
saber que el final está cerca, porque nada es
verdad, el amor verdadero no existe, no existe
la fidelidad, ni los versos que aquí dejo como señal,
solo deja pasar el tiempo, y verás que ya nada es igual,
dejaré esta noche caer mis angustias, y quemarlas en
tu olvido, para que no sientas que arde por dentro
el fuego de la pasión que tu cuerpo me dejó,
porque nada es eterno, como la vida que queremos vivir,
porque amar es un veneno que consumimos
una vez en la vida y nadie puede desintoxicar el alma,
ese veneno ya mortal, nos da como señal
el final de lo que creímos que era un amor real .
Vane Palacio -Argentina-
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