Dormir en soledad...
Caminante errante en este desvarío, fabrica de sueños exhausta,
entre alicientes y anhelos que no despegan de ser sueños.
Tirar del carro diario que es la vida. Como brazo en cabestrillo que es lastre. Entre constantes empeños, frustraciones y esperas que desesperan mi quietud.
Intentos salobres de avanzar, pensamiento positivo en mañana...
pero, que mañana? no hay nada solido...
Las paredes de mi mundo se tambalean; caen como plomo certero y vencen. La casa donde vivo solo es casa, no tiene alegría, ni vida, ni muerte... Estancada en este tiempo, atrapada sin ser jaula ni cárcel,
pero, nada acontece...
Los días se derraman lacios,
como cera de vela corren y se acaban,
uno precede a otro y nada cambia;
marchitos sin apenas sol, sin paraguas.
Entre mis raíces (que olvido) retazos y fragmentos de ayeres concluidos.
Echo la mirada atrás y me arrasan, se clavan como estacas de dolor que no se calma.
En el espejo de la entrada los fantasmas y angustias de mi mañana.
Grandes ventanales pero, no dejan pasar nada; la luz es opaca, grisácea como mi mirada...
Sin voces amigas que llamen al jardín de esta mi ventana. Esparcidas en este mundo redondo no llega su eco, ni aprieta su llamada... Agudizo el oído pero no me llega nada...
Entre estas cuatro paredes me recojo como crisálida al amparo de mi dormir con la soledad, soñando despierta que, mejor sera mañana...
Abono el crecer de mis alas con desvelos al alba...
A veces, doy por finalizado este mi recorrido por este,mi mapa,
barro los granos de arena de mi mirada; a mis ojos desde la memoria
los visto con farolillos verdes de esperanza, los delineo con el temblor de mi mano y maquillo sus pestañas. Coloreo mis labios de rosa corazón
con muecas que agradan. Del fracaso de mi esencia me perfumo, me
armo de valor y me pienso con grandes alas...
...Es entonces cuando soy mariposa y no crisálida...
LOLA WIZNER
viernes, 1 de noviembre de 2013
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