Amiga lejana,
hoy quiero decirte:
que cautiva entre sus brazos
me encuentro cada noche en su prisión,
me enloquecen sus besos,
su aroma al respirar.
Me transporta a sus dominios
cuando toca mi piel,
arden mis senderos
cuando se hace mi dueño,
conquista mis sentidos,
invade mi mansión
embruja mis latidos,
cuando bebo su vino.
Mi mente ha claudicado,
me pierdo en su razón;
solo atino a vivir
al.ritmo que me indica
y la música intensa
que le pone al compás.
Me enseña su lenguaje
su aíre tan sensual,
él me lleva a su mundo
de goce sin igual.
Ternuras que se unen
con el verbo amar,
amarlo es mi delirio,
mi síntesis final.
Claudico y me libero
cada noche ante él.
Oh, luna de abril que sabes,
comprender mi pasión,
a veces me sonrojo
y siento tu mirar;
¡yo lo amo mi dama;
soy mujer como tú!
Raquel Alejo -Perú-
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