Nuevas lluvias se precipitan y van
alimentando nuestra tierra fértil,
esos mares inmensos y los ríos
que surcan cada rincón de una
nueva existencia que adormecida
despierta, navegaremos libres
en veleros de ensueños, con
bellas caricias extraídas del
fondo del vasto océano, dando
brisas de ternuras por amor.
Nuevas lluvias han de pasar por
nuestras vidas llevándonos del
amor a la pasión y de ahí a un
paso de la entrega que se acerca
presurosa por las palabras y los
besos entregados, porque el éter
es todo en un todo cuando los dos
jugamos con las nuevas lluvias
buscando los mismos sueños en
el eterno juego del bendito amor.
Nuevas lluvias han de ser las que
me inspiren a seguir la senda que
trazada está en un destino del que
no se puede escapar, el cual nos
ha de unir en aquel lugar donde
confluye el arco iris que nos regala
las nuevas lluvias, donde el amor
reside y tu mi Musa llenas mis labios
de palabras y me llevas a un mundo
donde mi pluma y sentir emergen.
Sonia Iris Pérez -Argentina-
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