¡Oh Poeta!
Las tormentas que asolaron tu alma
Disperso los papeles del cuaderno
que celosamente guardaban tus letras.
Juguetona la brisa buscaba reunir los versos
Esparcidos por el viento a otros lares del desierto.
Una elegía en canto entonaba la brisa.
Duerme la tristeza, la soledad la acompaña.
Duerme tranquila velando su sueño
No quiere despertarla…
y la nostalgia no perturbe los sueños de enamorados.
Es el llanto del eco qué con lágrimas canta
Y con plañideros gemidos de esperanzas
Aprisiona con nudos en la garganta del Poeta
Qué perdió sus versos atemperados de sueños.
En lontananza del su desierto en su alma
las dunas se despeinan,
de su cuerpo rasgan y sacuden sus espinas.
Un oasis de aroma invade el ambiente
Perfumando las sombras del ríspido follaje.
Notas en melodías brotan del corazón
Del violín y de su alma.
Con fluidez nace de nuevo la Poesía,
Reviven sus versos.
Oh Poeta, podrá el viento
en osadía disgregar las hojas de tu cuaderno.
Pero la inspiración, tu Musa, tu diosa
Mágica y enamorada…
Vivirá por siempre en el alma de tus letras
Lesbia Mercedes Gómez
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