POEMA

Por ellos, los del 27 y los del 98

Frases hechas que en y por fondo arrastran
verdades populis que en alma son grabadas
con lastre recio por certezas alimentadas
de su hálito, una realidad con ansia y gana.

Sois de otra liga, así supe cuando os leí
así aprecié sin desespero, sin dolor
como el recio tronco al saludar sus brotes
o despedir sus frutos, como fuere entendí
que con letras el crear, gozar y enamorar
debes, limpia luna como alma tener, eso aprendí.

Epígonos o iconos, de su tiempo fueron
maestros que en arte de su hacer hicieron
en lujo de lloros y lamentos tal sensato sentir
como risas y sonrisas por su lectura en parir
dulce codicia de infante por poeta, crecer en mí.

Más en común tuvieron, amén de gran saber
amargos pétalos, sangrientas llagas,
preñadas vivencias de gran sufrir, sin fin
el uno, desgracia de puñalada en propio amor
trashumante o nómada por tal sino, maltrecho en tristeza
hundido por vivir, peaje desmedido que finó en otro país.

Otro por ignorancia y odio de necios, burdos peleles
robaron cobardes y sin querer ver, su vida, su sentir
en su misma tierra, esencia clave de su ser, fue su fin.

Como aquel de sensible alma que en celda padeció
avatares insultantes, ruines que falsos temores cebaron
a quien fue capaz de elevar la cebolla en altar, al yugo loar
recordar, desgarrado, al infante amigo, sufrió y no cejó
de amar a su país y por su credo, así, en dolor, nos dejó.

Aquí acaba como homenaje escrito para el ayer
lo que daría en alma por consuelo de esperanza,
sintiendo en siembra los tallos como suspiros crecer
de vuestros códigos, pensamientos por siempre
en pasquines encriptados de poesías comprender,
que hay dos ligas, señores, la de unos, los más,
simples, primarios hasta doler y la otra, amigos
cuna de genios, maestros del mañana, los del ayer
que así fueron los del 27 y 98, renacentistas del saber.

Del libro Poemario de un ideario de MAXI CAMPILLO PONS