lunes, 20 de mayo de 2019

NO PUEDO AMARTE MÁS...


No puedo amarte al unísono del viento acomodado en tus caderas, ni absorber de tus ojos el aroma silvestre. Sólo puedo amarte con las manos atadas a mi pecho y mirarte ciegamente, presto a ser demonio para inundarte de mí en tiempos de gracia o de insania
No puedo amarte más, no lo sé tampoco. Miro detrás de mi corazón y no hay pasado que nos aligere el paso de los días. Miro como todo es sombra aquí recostada sobre las calles de tu ciudad, y me acuerdo que no voy a ninguna parte, que soy apenas un hombre a la mitad, un señuelo, un despeñadero, un grito inmenso, una grieta, un pedazo de hielo.

No puedo amarte más amada mía. ¿Será que estoy fingiendo la madrugada en que te tomé de las piernas y gemiste como la voz de las tormentas? ¿Será que he de morir con tu boca entre mis labios, agitando mi lengua como los santos evangelios del furor y la lujuria? ¿Será todo mentira? ¿Será tu amor mi alma deslumbrándose, mi corazón apertrechado a tu cintura? ¿Seré tu hombre un día de vida o en la muerte más imperecedera?

No puedo amarte más...
No puedo seguir amando un sueño inexistente, una fugaz melodía de las que tanto escucho cada noche. No puedo seguir bebiendo de tus formas de tocarme, no existen, no existo. Sólo soy yo queriendo amar un volcán encendido, un fuego que no cesa, un aire comprimido a mis latidos. Sólo soy yo amando lo impensable, lo que hiere o desentona.

No puedo amarte más, porque no existes, porque de mis pupilas te he extraído más benévola que nunca. Porque o eres tú o soy yo. Porque la vida no para, y el alma mía pestañea con tus dedos... Porque fuiste creada a imagen y semejanza de mis instintos. Porque todo en esta vida es apenas un silencio abrumador donde cada uno se inventa el regazo menos desdeñoso. Porque te amo sin poder amarte más, pudiendo buscarte, queriendo buscarte, y no lo hago. Porque has hecho de mí ese solo refrán donde cuento a cada hora cómo me haces el amor, y respiro hondamente. Y es lo único que me apetece, aunque todo sea mentira, y me aferre a cualquier cosa para no naufragar, para caer al menos dentro de mí mismo.

Germán Rodríguez Aquino 

No hay comentarios:

Publicar un comentario