EL VUELO DE PEGASO / EL VUELO DE PEGASO (2)

EL VUELO DE PEGASO 

Volar alto, casi rozando el cielo,
en eso pensaba esta mañana,
al alba, al trasluz de mi ventana
entre nubes de algodón y terciopelo;

ilusión infantil por ese vuelo
deseando alcanzar una isla lejana;
donde cede el Mal y el Amor gana:
¡Encantada ínsula de feliz consuelo!

Por amigo, un generoso delfín
compartiendo piruetas en el agua
entre un mundo de corales sin fin;

… besos celestes del más lindo serafín
por seguir trotando cielos sin tregua:
¡Cual Pegaso! ¡Hasta lejano confín!

EL VUELO DE PEGASO (2)

Eres, chiquilla que fuiste
niña de precioso reír;
mujer, que dejándose ir
a mi lado viniste
sin querer el amor rehuir:

¡Real, alegre, retrechera;
de porte elegante!

Al tenerte delante
es arte que yo ya viera
en un sueño fascinante:

¡Sobre enormes alas
de un blanco Pegaso!

Volando sin hacer caso
de sonrisas que regalas
al sol,… quien ríe a tu paso:

¡Cruzando un ancho cielo
de océanos inmensos!

Con picados y ascensos
que recrean tu vuelo
viviendo gozos intensos:

¡Contra vientos
donde enredas tus cabellos!

Y esconden ojos tan bellos
que, por momentos,
resplandecen tras ellos:

¡Con noches de luna
cual muda testigo!

Quien por darte abrigo,
sin pausa alguna,
se arrebuja contigo:

¡Con días de sol brillante
que da en tu cara!

Y ya no se separa,
cálido y vigilante,
de cuánto de ti acapara:

¡Envuelta entre nubes
volando ríos y desiertos!;

… miles de mundos descubiertos
mientras subes
hacia cielos más abiertos:

¡Con juegos y risas
de inocente alegría!,

… que al despertar el día,
entre premuras y prisas,
inundas de poesía.

Paco Aguilar Espada