El amor me ha puesto su trampa; unos ojos bonitos y unas grandes pestañas, que me atraen de sobremanera, que aceleran mi latir, que da sentido nuevo a mi existir... El amor es como una telaraña, tendió su red y tiene una manera única de convencer...
me susurra al oído, me sonríe bonito, y suele decirme lindura de amor; cuando se encuentra conmigo. ... El amor es generoso, todo me da... y se disculpa y llora cuando con sus actitudes le da por equivocar...
Agustín H. Castañeda
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