¿Cómo poder salvarme de ser eco
que se prolonga en mí repetitivo
para tener indicio de que vivo
debajo de la piel en que me seco?
¿Cómo aceptar la eterna brevedad
que me besó y se fue a la desmemoria
para dejarme en esta ondulatoria
cavilación feroz y sin piedad?
¿Cómo lanzarme en brazos de la nada
después de haber creído en la llamada
a individualizarme en cada acera?
¿Cómo apartar mi pretensión de nube
creyéndose que sigue a más, que sube
a un cielo promisorio? ¡Qué ceguera!
Jorge García de la Fe
No hay comentarios:
Publicar un comentario