Lejanía del tiempo que dejó el suspiro
plasmándose entre versos
historia de una sola senda
la locura traspaso emociones insospechadas
por aquel regalo de amor
que al cuerpo y esencia transformo.
Fueron suspiros del tictac del reloj
donde la alegría iluminaba la vida
y la dicha la tornaba siega
era el timo de un alma solitaria
tan sólo deseaba compartir
las mieles del amor.
Ilusa se mostro
su cuerpo rejuvenecía al tenerle
el cosmos del intelecto se habría ante ella
era un espejismo del corazón.
Él se pavoneaba riéndose por aquel querer
pero entre caricias tiradas al viento
ella lo seducía
aterrado quedaba aquel varón
en un instante al cataclismo la llevo.
La demencia camino por las calles
en el trastabillar de su pesar
levantándose entre la poesía
gritaba su calvario
surcando estrellas en la imaginación
fantasía de novelas idílicas de un gran amor
mitigar con ello la irracionalidad.
Ahora su esencia pinta nuevos colores
su revoloteo muestra que quiere volar
al universo de posibilidades
manifestándose con todo su esplendor.
Sandra Méndez -Guatemala-
No hay comentarios:
Publicar un comentario