En una roca sentada
observando el mar y el cielo,
el mar con olas blancas
de espumas que van y viene
a mi encuentro.
El azul de esas aguas,
que huele a ese barco velero,
navegando hacía la orilla
donde sabe que le espero.
Mirando al cielo van mis ojos,
también azul como el mar, con nubes
que corren como palomas
blancas al volar.
Las nubes bajan despacio
para beber en el mar,
¡ya no veo mi barco!
Las nubes cubriendo están
se llevan ese agua de color
azul para los campos regar,
con olor del azul
del cielo y el mar.
Loli Brenes -Conil-
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