Devoción inseparable de deseos
medulas conciliadoras de sueños,
cirujanos de una degenerada humanidad
que en el trueque hacen dormir la realidad
impresión apocrifita de besos y abrazos
limitado regocijo y consuelo
en un leguaje singular
en una dinámica concebida para ser falsa
donde el viento destruye
la ingente penumbra
y se abre liberada de ultrajadas ceras
donde una escarcha llora
cubierta de sangre y fuego
idolatrado incienso
que ni ruido, ni suena , ni grita
solo ave migratoria
en la dirección y sentido del poeta
condición y principio en el subir y bajar a la luna
muy lejos en la totalidad del firmamento
consideraré un accidente de la inspiración divina
que minuciosa la hélice del timón
escéptica entre marinos, ángeles sin alas
entre flor y corona preñada
el primer trono, surco arado por ti
será texto de nuestra historia
ni el timón con sus válvulas de hierro
invadiendo árboles y arbustos
tendrá las últimas palabras de nuestro sendero
tu pluma en ese instante
gravará ese lugar con nuestros nombres
no seremos olor de podredumbre
no seremos acordes de harapos
no seremos decisión ni obra de nadie
traspasaremos los cuervos que merodean
no seremos esclavos de nada
libertad, luz de relámpago
solo respirar y fuego
solo en una unidad de versos
por fortuna en su honor
los deseos y la suma de nuestra sangre
serán manantial para nuestros exaltados cuerpos.
García de Garss
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