PILLO

Espero esos momentos soñados,
las horas siguen pasando
y el teléfono guarda silencio,
tu imagen, que es mi secreto
callada, sigue mirando,
espero ese instante y espero.

Tocan mis dedos, mis labios
por un recuerdo que sigue quemando
y sonrío pervertido
por el beso que di en aquel sitio
sin haberlo conquistado
pero el diablo, también es pillo.

Te quiero, ¡ay!, si pudiera negarlo
por tres veces lo he intentado
y a nadie he convencido,
ya saben que estoy vencido
y a la vez, estoy colgado
del árbol de tus caprichos.

Y espero, llegue otro momento,
espero tirado en el suelo
replicado en mis estados
de amante fiel y sincero
que cumple, cruel, tus pecados,
no... no me esperes en el cielo
no es el premio que he ganado,
yo te esperaré en el infierno
si es que algo te he enseñado.

Luis Maria Saiz Laso