Es un grito de dolor,
es un necio grito de dolor,
mi corazón se deshace entre las pieles
de palabras ennegrecidas,
de malditas palabras que te enajenan
hacia un lado oscuro de tu alma.
Ni un te quiero,
ni una dulce mirada,
ni una mano extendida
que te ayude a soportar
esta negra ventisca
que aleja mi felicidad.
Siempre hay un ¡ay!
en esta vida de humilde,
que nunca quiso hacer daño,
y por no dañar,
la rompieron en pedazos.
Ya no queda nada
de aquella que fue...,
nada.
Quiso ser tan fuerte
que se rasgaron sus alas,
y se perforó su vientre,
y sus ojos sangraron
lágrimas eternas de dolor,
en un cielo de constantes tormentas,
en un cielo obscuro,
donde sólo brillan los rayos,
ni lunas, ni estrellas...,
sólo rayos y truenos.
Y mi alma,
el día que me muera
descansará en Paz.
MILAGROS RUBIO MAS
CUADERNO VERSOS EN EL ALMA.
.. en esta vida de humilde,
ResponderEliminarque nunca quiso hacer daño...
Excelente aportación. Gracias.