Podría, comprar tu “cuerpo”,
tu belleza para tenerte conmigo
el tiempo que quisiera por amor,
pero tu cuerpo y tu belleza,
tan solo seria como tu amor vacío.
Tan vacío como un vaso sin agua,
tu amor como el viento pasajero,
tus besos como el trago amargo,
tus caricias como el hielo de la nieve,
aunque comprara tu vida, no me quisieras.
Tu amor fuera, como una naranja
sin sabor, tan agria que ni pudiera
besarte cuando te viera,
pudiera comprar tus besos, tus caricias,
siempre que quisiera tenerte conmigo.
Pero de que me sirve un amor
comprado sin primaveras,
sin otoños ni inviernos y sin hoguera,
sin veranos ni flores en los campos,
tan solo fueran amargas caricias tuyas.
Podría comprarte por el precio que fuera,
para tenerte conmigo y amarte,
pero de nada sirviera, comprar tus besos y
caricias, si tu amor no seria sincero y verdadero.
Podría, pagar el precio que fuera,
pero seria como comprar lo que nunca hubiera,
la vida “después” de la muerte aun amarte,
la “salvación” sin derecho a tenerla, como tus besos.
Entonces, como podría conquistarte,
sin que tuvieras precio para tenerte
entre mis brazos y verte feliz sonriente,
podría comprar tu cuerpo, tus besos y caricias,
tu vida entera, pero de nada, eso me sirviera.
Poeta Zaldaña
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