Cuando me duele el espejo, hay canas en mi ayer, arrugas en mi voz y la piel casi no es mía. Soy otro que envejece en la sombra, vicaria, de la imagen, en la muerte repetida que es la noche,a las puertas de una mirada que se abre hacia el el dolor. Cuando me duele el espejo, de mí se aleja un poco, el amor.
Victor Diaz Goris
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