NOCHE DE BRUJAS

Esta noche es luna llena. Hoy las brujas recorrerán las estrechas calles montadas en sus escobas. Antes de la medianoche se cerrarán las puertas y ventanas. Hay que proteger a los niños y evitar que las brujas se los lleven. La luna pasada desapareció un niño de su cuna.  La ventana estaba abierta. Un fuerte olor a azufre llenaba la habitación. Pese a la intensa búsqueda realizada por Guardia Civil el niño continuaba desaparecido. Se registraron cuevas, barrancos, pero ni rastro. Por eso hoy el Ayuntamiento ordenó, como precaución que antes de la medianoche todos los vecinos se retiraran a sus casas y cerraran puertas y ventanas.
El reloj de la parroquia dio las doce campanadas. Todas las calles estaban vacías. Un fuerte viento empezó a soplar. Crujieron las viejas maderas. Un murmullo de voces se oyó en la plaza. Una música rompió el silencio. El olor a humo y a azufre se coló en todas las casas. Las brujas celebraban su aquelarre mensual.
Poco a poco volvió el silencio y solo quedó en la plaza la ceniza de la hoguera que los vecinos vieron tras la salida del sol.
Este mes no hubo desaparecidos porque las puertas y ventanas quedaron bien cerradas.
Hasta la próxima luna llena estarían tranquilos y salir a pescar sin miedo a que sus hijos se los llevaran las brujas.
Además durante el mes se sucederían los conjuros para proteger el pueblo de las malignas brujas y alejarlas para siempre.

JOSÉ LUIS RUBIO