Antes que el año desaparezca, pregúntate cuantos besos diste y recibiste, y cuantos te faltaron por dar y recibir. Cuestiónate cuantos y cuales sacrificios estás dispuesto a hacer por amor (tu amor), y si la otra persona también está dispuesta a sacrificarse por ti. Antes de que un poco de tu alma y piel vuelen con el año, indaga en tu interior si estás dispuesto a traicionarte por conseguir tus metas y, sobre todo, si vale la pena. Antes que empiece un nuevo año, pregúntate si, acaso, has sido, o serás, feliz…
Victor Diaz Goris
No hay comentarios:
Publicar un comentario