Tus labios de siglos en besos de ahora;
fulgente estrella en ojos de ayer;
tibieza de cuerpos en este anochecer...
¡Reloj de los años sin otro amanecer...!
¡Reloj de años que todo lo ignoras
no corras tu esfera... detén esta hora;
quejarme en sus brazos y en ellos fenecer!
¡Detén aquella hora... detén esta hora!
Emilio J. León
Publicado en Pensamiento
No hay comentarios:
Publicar un comentario