martes, 1 de enero de 2019
RENACER
Bum bum... bum bum
Escucho el latir del corazón dentro del pecho mío, siento frío, bombea sangre por mis venas pero no es calor lo que hay en ellas, lanzas puntiagudas rasgan mis entrañas.
Ese sonido de nuevo, un eco continuado que no cesa su sonar, le vuelvo a escuchar.
Bum bum...bum bum
Mis pulmones se expanden por el aire que no logro respirar, no siento ningún ahogo, seré un escamoso pez quizá, carezco de agallas, tampoco soy sirena si acaso un grano de arena bañado por el mar.
Bum bum...bum bum
Ahì está de nuevo, mi cerebro analiza el sonido, parece el tambor de un desfile militar, caigo en la cuenta, mi cerebro piensa, analiza y reacciona por lo tanto funciona, no ha dejado de trabajar.
Bum bum... bum bum
Sigue fluyendo la sangre cada vez más espesa, los párpados me pesan, se cierran, no tengo sueños, no es sueño o acaso es una pesadilla del sueño no soñado, no lo sé, no lo entiendo es algo en verdad ignorado.
Bum bum...bum bum
Me alejo, te dejo, el sonido es apenas audible, mi cuerpo flota como pluma al viento, no te siento, no te veo, no te escucho, pero sigo aquí de pie, frente a ti, dándote la cara y retándote a vivir dentro de mí.
Bum bum...bum bum
Sigue la batalla en combate, no te temo vida, estoy en pie de guerra, late fuerte corazón, calienta la sangre en mis venas, ojos, oídos, despierten al grito de mi enmudecida garganta, manos, uñas, dientes, arranquen el envejecido cuero que un vestido nuevo hay por estrenar.
Bum bum...bum bum
Vibra intenso corazón que la vida es vida con y sin razón
María Villicaña
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