AMANECERES MÁGICOS

Un rayo de sol es suficiente para borrar miles de sombras, pero no borrará el más hermoso amanecer en tus brazos, tomando el resplandor en tus manos para llenarte de calor.

Las noches frías no son nada, imaginando tus amaneceres mágicos con ese calor que toca tus manos y calienta tus sentidos, con esa sábana que trasluce tu bella figura sutil con tu hermosa cabellera.

Amaneceres mágicos que desencadenan en esa sábana que acaricia tu piel ardiente, sintiendo cada parte de ti, basándote con tal suavidad y no hay terciopelo que iguale la tersura de tu piel candente.

Danzas con tal delicadeza y cada movimiento es un éxtasis de locura en ese frenesí eclipsado por tu sábana que ama tu piel y siente desfogar esa explosión total de tus entrañas y todo en tus amaneceres mágicos...

CARLOS V. ORTIZ