jueves, 27 de septiembre de 2018
TODAVÍA NO LO SABES
Un poema para todos aquellos que no se animan a decirlo.
Todavía no lo sabes
Pero voy a amarte como nadie,
porque disfruto de tu sonrisa,
antes que el aire de tus alegrías.
Y percibo tus suspiros,
antes que los demás tus exaltaciones.
Voy a acariciar hasta el fin tus ondulaciones,
antes que los demás tus curvas,
jóvenes y enardecidas.
Disfruto de tus besos,
antes que el universo de tus labios.
Y te busco entre las sombras,
para mostrar tus candelas,
porque el mundo es más hermoso,
con tus colores y tus recuerdos.
Todavía no lo sabes
Muero por decírtelo
Pero voy a iluminarte como nadie
Porque conozco tus antojos,
antes que los demás tus dones de madre.
Y adivino tus penumbras,
antes que ellos disfruten de tus claridades.
Acaricio tu pelo,
antes que la brisa sople por tu cuerpo.
Y me incinero en tus pétalos y tu piel,
antes que las sábanas,
se fundan con tus deseos.
Todavía no lo sabes.
Voy a adorarte más que las flores,
a las madrugadas y la brisa.
Porque soy el que fortalece tus mentiras,
antes que los demás justifiquen tus verdades.
El que anhela peinarte en las mañanas,
antes que el alba se cautive de tu presencia.
El que te sueña en el crepúsculo,
antes de abrazarte en las noches.
El que despierte mirándote,
y que me mires soñándote.
Y el que sueña que lo mires...
Que lo mires enamorándote.
Todavía no lo sabes
Muero por decírtelo
Voy a protegerte más que tus ángeles,
y tu experiencia.
Porque siento tus latidos,
antes que los demás tus pisadas.
Tus tristezas antes que las baldosas tus caídas
Tus rosas mucho antes que tus espinas,
y tus aromas
Porque en tus silencios,
moran mis palabras y mi aliento.
Y en tus palabras,
se vigorizan mis oraciones y mis dogmas.
Todavía no lo sabes
Voy a adorarte más que la luna,
a las luces y los espejos.
Porque soy el que baja siempre la mirada,
porque tus ojos contienen océanos,
y los míos se derriten en tus mares.
Soy el que respira solo con tus sueños,
cuando los demás se regocijan en tus aciertos.
Siento tus anhelos antes que la tarde,
tus pretensiones.
Y pierdo mis ojos, mis labios,
mis manos y mi cuerpo.
Porque salen a encontrarte,
cada vez que no te siento.
Todavía no lo sabes
Muero por decírtelo
Lo daría todo
Porque yo…
Yo ya no respiro
Ya no vivo, ya no siento,
sino estás a mi lado.
Todavía no lo sabes
Pero yo…
Yo ya estoy enamorado.
Daniel La Greca
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