POESÍA INTEMPORAL

Al filo de la Era
la noche de mis ojos me desnuda,
el ojo que en sí mismo se refleja,
la duda que a si misma se cuestiona,
¿Qué soy?
¿Pregunta?
¿Respuesta?
...Anhelo, ansia o tal vez un eco
suspendido entre los hilos del siglo.
¿Soy o no soy?
ayer la más acérrima enemiga,
hoy la mas ferviente aliada,
¿seremos calma, o torrente
subconsciente de recuerdos?

Humanidad que me habitas,
madeja intemporal de sueños,
que orbitan a capricho del viento,
¡dualidad de formas!
entre la incertidumbre de lo habido,
abajo es arriba,
y más es menos,
pero en la multiplicidad del cosmos,
entre las manos ásperas del tiempo,
aún yace el pétalo indeleble de mi fe.

Y aquí, postrada en el rincón de mi recinto,
puedo contemplar las más álgidas estelas.
No me aparta el umbral de la discordia,
ni me intimida el fragor de la violencia.
Puedo ver un mundo de rosas entre espinas,
una muerte sin muerte, ¡una muerte que es vida!
emerger del caos a los niños, y ver la gota de sangre
que derrama el progreso,
enjugada con el paño verosímil
de la ciencia.

Acarician mi frente nuevos aires inciertos,
y en la ventana del jardín de mi aposento,
se esparcen también mis pensamientos;
y la pregunta inicial
ha quedado indecible en el más absorto cauce,
... hacia el infinito silencio.

LOURDES AVILA ZAPIÉN -México-