LUMÍNICA ALEGRÍA

En este momento me encuentro relajado,
como si fuera un amartelado chico
que recibe sonriente
y
positivo,
al naciente año
y
me hace sentir que soy un experto mago,
el cual maneja la penumbra terrenal
y
el fulgor divino;
porque anoche decidí
revisar el arcón de los recuerdos,
para seleccionar lo bueno
y
desechar lo negativo,
asimismo, a todo lo adverso le prendí fuego,
convirtiéndolo en cenizas en la pira del olvido.
Para seguir triunfante
y
liberado,
celebrando por todo lo hermoso que he vivido...
estoy acumulando flores de fragante aroma
y
alegre colorido,
para llevarlas en el fantástico globo del ensueño,
en donde me subiré ahora mismo
y
así empezar el anhelado vuelo
y
productivo recorrido,
que me ayudará a seguir repartiendo esperanza
con mis cotidianos versos,
de musical lirismo
y
al mismo tiempo desde arriba eludiré las trampas
que me pondrá el destino,
para evitar que con pétalos alfombre la senda
de todo aquel desventurado
que avanza descalzo,
recorriendo desamparado,
lo agreste del camino,
ese que lo conducirá a la fuente encantada
en donde se genera el optimismo
y
fluye a borbotones la armonía.
Hoy amanecí guarecido
por una coraza de perlada blancura,
para proteger mi reservorio
manador de humildes sentimientos
y
aliciente ternura.
Me siento volátil,
despojado de envidias
y
rencores,
cubierto por un manto de cromática añoranza
y
lumínica alegría,
la misma que destruye mis pesares,
permitiéndome embriagarme
con el néctar de la felicidad,
festejando acompañado
o
del mismo modo celebrar
aunque me halle en soledad.

Gerardo Carrascal Santiago -Colombia-