UN SEGUNDO PLANO

Hace falta un golpe de locura para desafiar un destino.
Marguerite Yourcenar.

Despiertas puntual.
Te pones de pie y apareces. El telón se descorre.
Has aprendido el libreto. Has memorizado las instrucciones del director.
Aunque sabes que la perfección no existe, sales a buscarla.
Todo marcha bien hasta cuando – desnuda y en puntillas –
Entra a escena la imperfección cargada de locura.
Ella, sin que lo notes pone en tus manos el azar
Que será tu comodín.
Ahora te perderás en ti mismo.
Serás una sombra reencarnada.
De tu cabeza  crecerán otras que hablan en lenguas diferentes.
Al final, tú junto a tus fracasos salen por el foro
Y te alejas en la penumbra.
Ahora, la audiencia aplaude regocijada.
Pero tú ya no la escuchas.

Jaime Arturo Martínez