NO ME CONOCISTEIS

No me conocisteis, creíste conocerme.
Pero nunca dedicaste el tiempo para conocerme.
Nunca me brindaste la oportunidad para entenderme.
Ni si quiera me diste la oportunidad demostraste quien era.

No me conociste, fingiste conocerme.
Creíste conocerme, pero no era así.
Le decías a los demás que yo era fácil de entender.
Dijiste que ya me dominabas, que era asunto resuelto.

Pero la realidad era diferente, era distinta.
Se te olvidó conocer a mi corazón, entenderlo a él.
Aunque te lo entregué en tus manos,
no supisteis entender que mis latidos era solo por ti.

No me conocisteis, creíste que me conocías.
Pero no entendiste que mi alma era diferente,
que mi alma no era igual a las demás.
Que mi alma guardaba un amor tan grande,
diferente, que solo era para entregártelo a ti.

No me conociste, ni siquiera intentaste conocerme.
A pesar de que te entre mi corazón
y mis besos eran solo para ti.
A pesar de que te entre mi alma
y mis manos solo eran, para acariciar tu cuerpo.

No, no me conociste, porque si me hubieras conocido.
Y supieras en realidad como soy en verdad.
Hubieras sabido que tú eras, eres y serías,
a la única mujer, que amé y a la cual yo le hice el Amor.

Edwin Ayala Sánchez