NADA ES TAN SEGURO

Nada es tan seguro como el amor de Dios, ni la lluvia constante y mesurada en invierno, ni la calidez de un verano, el amor de Dios puede inundar tu vida pero nunca ahogar tu alma, el amor de Dios puede quemar tus venas, sanar tu corazón abrazándolo con fuego, pero nunca llagar tu corazón.

Nada es tan seguro como el amor de Dios, ni el dinero que crece en las esquinas de una pobre alma ni la pobreza que crece en el techo de un desposeído, la vida da vueltas, pero el amor de Dios es más seguro, por crecer en el alma de pobres y ricos, por sanar heridas en corazones rotos.

Nada es tan seguro como el amor de Dios, nunca expira y es incondicional, no conoce de racismo, ideología política, credo religioso, no distingue de pobres y ricos, nada es tan seguro como el amor de Dios, que crece en las praderas de paz en medio de una guerra, o se vierte vertiginosamente en un desierto, que corroe el sarro de un alma empobrecida nada es más seguro que tu amor Señor.

Ramiro Peñalba Pinell -Nicaragua-