sábado, 8 de octubre de 2016

EL TRÉBOL


¿Cuál proeza deshará el agravio
que un día en el desespero pronuncié,
se convierta en nada,
ante el más puro sentimiento
que desde que te vi nació en mi ser?
¿Cómo hago para que mi alma veas
con la transparencia de un cristal
sepas que su brillo tornó al rosa
y está lista para volver a ayudar?
Lo que tú dispongas yo lo hago
solo recobra la fe en mi corazón
para que sepas que ya  he mejorado
y me dejes acompañarte en tu canción.
Si me pides subir a la montaña
desde el Everest te conquistaré.
Si me pides que vaya al mar profundo
en la zona abismal te aclamaré.
Cruzaré el desierto más ardiente
entre la arena te recordaré.

Viajaré hasta los más lejanos polos
entre el frío de mis pies te extrañaré.

Si me pides que me convierta en una piedra
la roca más grande yo seré.
Si me pides que sea un simple bicho
desde los ojos de un bicho te veré.
Si me pides sea yo un sencillo trébol
en ese trébol me transformaré…
Para borrar de tu alma esta herida
cualquier barrera yo podré vencer.
Mientras sepa que junto a mí respiras
mientras sienta cerca de mí tu ser…
Me lanzaré ciegamente al abismo
en la profundidad del mar yo nadaré
subiré a la más alta montaña
andaré entre la sólida heladez
cruzaré el desierto más candente
en la piel de un ácaro mudaré mi piel
y mi confianza en ti, de trébol vestiré…

Del libro Inspirario entre Andares y Poemas de AMARANTA MADRIGAL -México-

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