No mires mis ojos,
hoy; por la mañana,
anoche soñé contigo amor,
y el llanto
se ha reflejado
desde entonces.
Cuantas veces,
he tratado de olvidar
la última sonrisa
de tus labios,
y no he podido.
No quiero quebrar
la promesa
hecha en vida,
Si he de alejarme
siempre sabes
que lo cumpliré.
No quiero que pienses
en este escrito como tuyo,
tampoco que es parte
del olvido.
Sólo son...
palabras para sentirme
vivo sin tu presencia.
Felipe Sánchez Gonzáles -Perú-
No hay comentarios:
Publicar un comentario