LOS COLORES DEL AGUA

Aguas de la niebla en la fría alborada.
Aguas del ocaso, cárdenas y bermejas, en el crepúsculo de la tarde.
Aguas de la noche estrellada
aceradas por la luz de una luna enamorada.

Aguas pasmadas… dormidas
en la pena infinita del lago silencioso
perdido en la solitaria montaña.

Aguas melancólicas…narcisas… del mar en calma
que se buscan en el espejo del cielo.

Aguas cristalinas… rumorosas… ¡siempre femeninas!…
que nacen del amor de una piedra madre
y se abren cantarinas por arroyos y riveras.

Aguas cargadas con los sabores, perfumes y colores de la tierra
que se arrastran indolentes por tediosos meandros
dejando su huella parda en selvas interminables.

Aguas ruidosas, con crestas de plata en los rápidos…
poderosas… incontenibles como potros indomables.

Aguas en ribazos y praderas
perladas de rocío mañanero brillando al sol.

Aguas cansadas… detenidas en su carrera
en busca del reposo de la nieve.

Aguas ligeras… transparentes…
como la vida que nace.

Aguas pesadas… profundas… oscuras
como la muerte soñadora.

Todos los colores del universo
se encierran en una gota de agua.
Como la historia del hombre.
Como la promesa de vida del arco iris
hijo del sol y de la lluvia.

Nada cambia como el agua…
quizá… solo los sueños…
delirios del hombre, perdidos en los ensueños del agua.

Alberto López