ANAÍS NÍN

La pasión por la música la pintura y la literatura, constituyen
arbitrio diferente.
Ese delirio dionisíaco provee el más grande beneficio, es decir,
se concibe la Vida lógicamente, abrazando el arte.
¿Qué experiencias e impulsos hicieron en ANAÍS NÍN el umbral del optimismo
y la disolución de lo trágico?
¿Qué la desembaraza de las corrientes en un mundo creado?
En la juventud, de salud fue endeble y vio fatalidad en el fondo de las cosas.
Mas a despecho de las predicciones de los Médicos: Repasar casi en agonía
sus Diarios de infancia y retomar lecturas ya olvidadas, la devuelven a la vida
y como al Místico la dotan de un conocimiento.
Esos mohines de gata delicada, la hacen de cristal, casi bailarina religiosa.
En vos cantante y cadenciosa exhala cuitas, aunque con púas en la lengua.
También esa perversión de sentimiento en negarlo todo.
En tardes cálidas la hallé echada sobre el pasto, con ojos profundos
observando luces deshuesadas, entrando en un horizonte muriente.
Era yo el mozuelo principiante de modelo
y amé sus manos finas,
su mentón suave, rematado en divino óvalo.

Del libro TROCITOS DE ELLA EN MÍ de OMÍLCAR CRUZ RESTREPO -Colombia-