NECESIDAD

La soledad no habita, no se lleva no se deja.
Detrás de las vidrieras el amanecer disuelve las sombras
y la hora fatídica le llega a cualquiera, o la esperanza.
Se huele a disfraz en alguno y sin embargo
alguien dice y señala — esa cara la conozco.
Una desgracia sin precedentes se debate sobre él,
piensa alguno, pues no halló lo aspirado.
Ah, una cosa sobre otra, y cada uno está solo, sin ayuda.
Entonces acuden a la Superstición. Donde alguna voz
retumba: ¡Venís a la Bondad, por necesidad!
¿Tenéis conciencia de qué glorificabas?
Oh, no. Buscáis bondad, protección y piedad divina,
si tenéis necesidad.

Del libro TROCITOS DE ELLA EN MÍ de OMÍLCAR CRUZ RESTREPO -Colombia