Versos que salen en busca del amor
en la libertad del corazón
del que entregue las mieles de la pasión
caricias sin condenas
locura infinita del destello de la fantasía.
Alucinación de pretensiones que no cuajan
en el alma solitaria
que entre poesía degusta navegar
en silencio observa lo que nadie ofrece.
Cantos se escuchan con sublime frenesí
pero nadie la saca del olvido
aquella caricia que con su luz
de la oscuridad intente quitar.
Palomas con mil mensajes llegan
lisonjas del viento
cantos de odas bellas
pero los copos del reloj y la distancia
son murallas impuestas.
El tiempo corre y la nostalgia perdura
entre noches eternas
sin encontrar los detalles que se ansían
y los besos de un gran amor.
Sandra Méndez -Guatemala-
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