HOMBRE DE CORAZÓN POETA…

Se pierde la mirada en el deambular del tiempo.
Desde el pedestal florido de una tarde primaveral
enarco mi ser y subo a tu espalda para otear.
Demarcaciones de terrenos inexplorados.
Extensiones de campos bajo siembra de trigo
que un día pan será.
En mi retina amapolas de mi tierra como maná.
Explosión de colores en compañía y en soledad.
Lluvia perlada, cara al sol en un arco iris
tridimensional.
Holograma imaginario que guardo en mi retina
para siempre recordar…
Gubias y pinceles cincelan la tarde dando forma
y colores a este paisaje sin igual en mi mente.
Incendiarios de alegría, en bella calma que traspasa
alma y corazón.
Incensario de cadenas libres, al viento su esencia
su humo y aroma se extiende en los campos
impregnándolos de color y aroma de amor.
Indescriptible visión-sensación.
Atrapo su humo cubriéndome de cabeza a pies
y me uno a su color…
Y son instantes en que me siento tierra,
cielo y aire celestial.
Abrazo esa sensación de vida, me la quedo
y la llevo al corazón.
Mi alma contenta se refugia en tus hombros.
Como a una niña me anima a volar con las
mariposas de flor en flor. A un viaje entre
trigales y amapolas fundido con mi yo…
Paciencia en tus hombros en espera
de mi regreso a esta otra dimensión.
Hombre de corazón poeta que a través
de mis complicados entresijos sabes
llegarme al corazón…Siempre en un
vuelo paciente y libre que es el amor…

Lola Wizner