ADIOS AMOR DE JUVENTUD

Adiós amor de juventud,
alegre ruiseñor, que anidaste
en mi alma,
como una diosa te amé,
¡oh cántaro de alegría!

Estrella de la mañana,
que al nacer el día, lo primero que hacía,
era besar tu rostro ¡oh dulce princesa mía!
luz y amor de mi vida.

Era muy joven, apenas… un polluelo…
empezaba a volar…, y ya era poeta,
quiero decirte, que me perdones… te he olvidado,
quiero que lo comprendas…

Me he enamorado de una verdadera diosa,
de ojos muy negros, como las bellas de Arabia,
es ahora mi esposa, pues… me casé con ella.

¿Cómo decirte a ti?... ¿cómo es mi amada?
en una noche que no haya luna… alza tu vista,
mira el firmamento y veras millones de estrellas,
en cada una… habita una diosa con túnica blanca,
te acercas… y allí está ella.
yo a veces… me pregunto ¿Cuántas tengo?
y cuando las veo, digo… ¡si solo hay una!…
¡así es mi bella!

Así… que me despido de ti… amiga mía…
años te tuve en mi corazón… sufrí tu abandono…
me torturé… por lo que tuve que ver…
pero mi esposa, me hizo olvidar hasta tu nombre,
pues te juro… que no sé, ni cómo te llamas,
me borro tu rostro… con un sola mirada suya…
con una sola mirada … curó mi alma…

FRAN TRO