jueves, 26 de febrero de 2015
MUERE EL POETA....
El ocaso se yergue nauseabundo
y el final se mece en la llanura,
mueren con el sudor las rimas
y los versos sollozan sin regazo,
los fonemas tristes en ventiscas
son lagrimal de llanto acongojado,
las palabras entre amarguras raen
y las frases deshojan la impotencia,
entre el poema se deshace la brisa
yerta mansedumbre sin calor,
muere el poeta, magra despedida
se oye en el eco, despedida de su voz,
el risco en el pasar hiere la senda
y el abismo de a muerte es arrebol,
muere el cantar, lloran las musas
las sirenas se quejan en el mar,
los céfiros encienden sus gemidos
entre napas sin son cae la brizna,
y el viento mudo si verdor
entre sátiros plebes va sin prisa,
minotauros azules se deslizan
y miran en sentir de la osadía,
entre mantos furtivos los sonidos graves
tocan arpas silentes, ángeles caídos,
y quejumbrosa la ocarina llora fúnebre
y en las nubes la lluvia se desliza,
entre relámpagos y truenos ya avisa
el poeta ha muerto, ha partido,
y la rima con él se ha enterrado
el poema ha cesado su versión,
porque el fonema ha fallecido
se ha marchado para siempre, ilusión.
JOSÉ VICENTE CASTRO -COLOMBIA-
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