TUMBA
El camposanto llora en silencio, con lágrimas de lluvia y rocío. Las hojas del sauce bailan al compás del airecillo. Todo es paz. Hasta en mi tumba, que alberga mis antaño belicosos huesos. En la muerte casi me arrepiento de mis horribles crímenes. Casi. El aire huele a sangre…
DELANTE Y DETRÁS
Delante de mí, el impertinente ciclista que no me deja adelantar. Detrás de mí, unas curvas después, una rueda de bicicleta gira sobre el asfalto. Uno más en la larga cuenta.
FRANCISCO J. SEGOVIA -Granada-
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