“… Los espíritus caídos te están llevando y arrastrando a un callejón sin salida, tú te estás dejando llevar por esos espíritus malignos caídos en desgracia y que quieren recuperar su dignidad degradando tu espíritu aventurero, tus fantasías, tus sueños. Esos espíritus malignos te están llevando por unos derroteros traicioneros, te están engañando con falsas promesas, con edenes eternos, lejos del mundo terrenal y tú tienes que vivir aquí y ahora tu vida terrenal, olvídate del futuro que vendrá y aprovecha el presente que se esfuma y se va sin darte cuenta real.
Procura caminar por sendas y caminos abiertos, estate precavido y atento, porque en el camino hay muchos delincuentes sueltos que te pueden atracar, robar y violar, porque la crisis económica azota brutalmente a nuestra sociedad y el hambre y la necesidad cambia a las personas, les mutan su personalidad y con tal de sobrevivir son capaces de cualquier cosa, incluso de matar.
Los espíritus malignos viven su época de esplendor, ante problemas sociales ellos se crecen y embaucan al personal de manera traicionera y rastrera, con su verborrea fácil, huye de ellos, recházales, marginales y huye de su peligroso círculo social, no te dejes convencer de todas las mentiras que te cuentan, aunque parezcan verdad tienen un doble fondo de maldad, que quizás no percibas en ese momento puntual, pero que después te arrepentirás al oír su discurso social plagado de “buenismo” porque aspiran a ser “políticamente correctos” por su charlatanería, por su afabilidad encubierta, por su piel de cordero, que esconde un lobo feroz, que en el momento que te descuidas te clavará sus fauces y te aniquilará. Busca de nuevo a tu espíritu caído y alicaído, dale bríos y fuerza a pesar de la que está cayendo, con la crisis económica y social y regenera tu alma y corazón y nunca te hundas por una traición…”
Juan Montero Lobo “Visnú” -Segovia-
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